06 marzo 2013

En defensa de Tartessos

LUNES, 25 DE FEBRERO DE 2013
ÁNGEL MARTÍNEZ
Diario Progresista

"Arrastrados por el viento del Este; y, sin dejar de soplar el viento, alcanzaron las Columnas de Hércules y, conducidos por un dios, llegaron a Tartessos" Así es como Heródoto narra en sus crónicas históricas la relación de los pueblos griegos – los samios – con aquella que se cree la primera civilización Occidental.  

Unas décadas antes, Platón, el más conocido de los filósofos griegos, había hablado ya de la Atlántida gran isla que estaba “delante de las Columnas de Hércules” datando la existencia de esta gran isla mítica, 9000 años atrás. El mito ya estaba instalado en la cultura. Fue ya en el s.XX el arqueólogo alemán Adolf Schülten el que relacionó ambas civilizaciones situándolas sobre Doñana, basándose tanto en textos históricos, como en pruebas del terreno, mapas y el estudio de los hallazgos arqueológicos de la zona.

No somos pocos los andaluces que fantaseamos con la leyenda de ambas civilizaciones, una real como Tartessos y otra fantástica y quién sabe si cierta como la Atlántida. Haber nacido en una tierra con la historia de varias civilizaciones que van sumando elementos culturales y progresando a la anterior, deja un campo poético clave para la recreación de cuentos y leyendas.

Pero para la conservación de esas leyendas, necesitamos que se resguarde el entorno natural que las contiene. Si bien es verdad que desde la creación del Parque Nacional de Doñana, las autoridades, regionales, nacionales, europeas e incluso de conservación medioambiental global (UNESCO) han tenido una actuación que ha posibilitado que la Reserva de la Biosfera pueda mantener su riqueza, hay riesgos que debilitan esta defensa ambiental de Doñana. A los acontecimientos dramáticos como lo acontecido en Aznarcollar, se suman en la actualidad otros riesgos como la explotación de los pozos subterráneos que está debilitando la regeneración de los acuíferos. Un segundo riesgo, según organizaciones como WWF, reside en el proyecto de almacenamiento subterráneo de gas natural de Marismas y el gaseoducto para transportarlo. Por último, y no menos importantes, se desconoce porque no hay estudios a fondo todavía, las tremendas consecuencias que podría tener el dragado del Rio Guadalquivir (o Tartessos o Betis según qué civilización lo nombre) para aumentar el tamaño del canal en su desembocadura y así conseguir que la adaptación del Puerto de Sevilla a barcos de más calado.

Ante estos tres retos, debemos ser los ciudadanos y ciudadanos andaluces que seguimos creyendo en el mito de Tartessos, en una posible Atlántida, los que digamos que no. Que no van a estropear el entorno que sostiene una reserva natural de la importancia del Parque Nacional de Doñana.

Andalucía debe ser signo de una civilización avanzada como cuentan que fue Tartessos, teniendo conocimientos científicos como ahora tenemos de las terribles consecuencias a las que nos enfrentamos por el cambio climático, debemos ser un pueblo en bandera de la defensa del medioambiente.

Otro caso claro para esta lucha, de los últimos Tartessos que quedamos contra las hordas de la especulación inmobiliaria, bárbaros de estos tiempos, debe ser nuestra defensa por el litoral, aún más en peligro por las últimas modificaciones en la Ley de Costas propuestas por el Ministro Arias-Cañete (este sí capaz de acabar vía gastronómica con todos sus adversarios) El mejor ejemplo para poner la primera barricada, es la Playa de Valdevaqueros en Tarifa. Una vez más el estrecho y la situación de las Columnas de Hércules, marcan el punto por donde no debemos dejar que pasen los artilugios de la guerra moderna, maquinaría de obra civil, que destruyan esas dunas, hábitat único del sur del Mediterráneo.

A otras grandes crisis nos hemos enfrentado los andaluces y las andaluzas y no debemos permitir que esta sea la excusa para que nos quiten lo que siempre nos ha distinguido, un entorno privilegiado, que es nada más y nada menos, que el garante máximo de nuestra cultura, por ser nuestro primer aliciente para escribir o para cantar o pintar, en definitiva para vivir a nuestra manera. No dejaremos que vayan contra nuestra primera inspiración, nuestra musa, que no es otra que Andalucía.

Y con esta primera columna, defino cual será mi objeto en este Diario Progresista, edición andaluza. Cargar las lanzas de la memoria del pueblo de Tartessos, en defensa de la cultura, del medioambiente y de la misma ciudadanía andaluza que cree en un futuro de progreso, con la igualdad como destino, con Ítaca como punto de partida y de regreso.



@angelmartinezx2

http://angelmartinezx2.wordpress.com  

No hay comentarios: